EL PROYECTO
El 9 de mayo de 2009, la Hermandad de la Piedad reunida en un concurrido Cabildo de Hermanos aprobó la ampliación de imágenes para representar el Santo Traslado al Sepulcro junto a la Virgen de la Piedad. Con el visto bueno del consiliario y la aprobación posterior de sus estatutos por parte del Obispado de Córdoba, con fecha de 13 de mayo, se consigue uno de los proyectos que un grupo de hermanos tenía en mente desde hacía una década y media, una idea que se estaba cuajando desde tiempo atrás en la Hermandad.
La persona elegida para realizar las nuevas imágenes, será el artista sevillano Fernando Aguado Hernández que entre otras obras ha restaurado las figuras del paso de Cristo de la Sentencia de la Macarena, ha realizado el Nazareno de la Caridad para la Hermandad Sacramental y de Gloria de San José Obrero de Sevilla o por ejemplo, este año, las cartelas de los pasos de las Aguas y de las Angustias de los Gitanos. A pesar de su juventud, se encuentra entre los imagineros más destacados de nuestra geografía y con una proyección artística que lleva camino de imponer un estilo propio en la imaginería andaluza.

ICONOGRAFÍA
El momento de la Pasión del Señor que ha sido elegido para ampliar el grupo escultórico tiene directa relación con la advocación de la Stma. Virgen de la Piedad. Ella, plena de dolor a los pies de la Cruz, se apiada del cuerpo sin vida del Santísimo Cristo del Amor, el cual proceden a trasladar al sepulcro José de Arimatea y Nicodemo, miembros del Sanedrín partidarios de Jesús. Ellos son quienes se encargan de mediar ante Pilato para poder dar sepultura al cuerpo del Señor antes del Sabbat. Ante la presencia de María Magdalena que besa la mano derecha inerte de Cristo y María Salomé que porta la corona de espinas, los Santos varones levantan el cuerpo de Jesús para iniciar el sacro cortejo hasta la sepultura. San Juan, que acompaña a la Santísima Virgen, escucha las palabras de José de Arimatea que le indican que han de iniciar la marcha. Mientras, junto a la Cruz, María de Cleofás, despide con la mirada a Longinos. Esta escena, completamente nueva dentro de la iconografía de este pasaje, representa la soledad y abatimiento del hombre. Longinos, soldado converso que tras haber comprendido la injusticia de la muerte del Hijo de Dios permanece junto a la familia, se marcha cabizbajo y lloroso dejando a sus espaldas al fúnebre cortejo que ha marcado el antes y el después de su propia vida. La escena se completa con la Cruz, la escalera, la sábana, el titulus y los clavos.

LA OBRA
Todas las imágenes serán realizadas en madera de cedro policromadas al óleo según las técnicas heredadas de los maestros barrocos. La imagen del Santísimo Cristo del Amor aparecerá completamente anatomizada. El resto de imágenes se realizarán de cuerpo entero para ser vestidas.
El estilo hiperrealista que imprime Fernando Aguado a sus imágenes, tallando rostros y expresiones humanas reales, harán que este misterio conmueva a todos aquellos que lo presencien, tanto en la salida procesional como en la iglesia.

JUEVES SANTO
La Hermandad con esta ampliación de imágenes, no se ha planteado en ningún momento ni el cambio de día ni de hora para su salida procesional. Por tanto, la mañana del Jueves Santo será cuando procesione por las calles de Cabra, el misterio del Santo Traslado al Sepulcro, siendo además, el único de la provincia de Córdoba en representar este momento de la Pasión.
Desde la Cofradía de la Piedad agradecemos a todos nuestros hermanos las muestras de unión y hermandad que nos regalan a diario, así como el compromiso y responsabilidad que asumen voluntariamente. También queremos agradecer a todas aquellas personas que nos han mostrado su apoyo y colaboración, para que este proyecto salga adelante. Un proyecto que tiene como objetivo engrandecer y mejorar la Semana Santa de Cabra.